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EL FUTURO INMEDIATO DE LA TELEVISION PUBLICA.

No son días fáciles en la intervenida TV Pública. A lo largo de toda la semana, en los pasillos de Figueroa Alcorta 2977 reinó la incertidumbre. Tras la renuncia –ayer, a menos de dos meses de su nombramiento, el 5 de febrero último– del productor Juan Parodi como director del canal estatal, se teme la posibilidad de despidos masivos post Semana Santa.

Parodi, que dejará oficialmente su puesto el próximo miércoles 27 de marzo, y la producción del canal impulsaron a los empleados a tomarse todos sus francos y compensatorios acumulados y se les advirtió sobre la imposibilidad de renovar contratos. Como parte de la reestructuración, Eduardo González se convertirá en el máximo responsable interino de la TV Pública a partir de la semana próxima.

La designación de Parodi estuvo envuelta en grandes expectativas tanto por su perfil, orientado a la innovación en contenidos, como por su trayectoria (fue director de programación de América TV, produjo un ciclo de entretenimientos para la TV Pública en 2016 y en 2018, con su productora, The Magic Eye, le dio vida a la miniserie Sandro de América para Telefe, actualmente disponible en Amazon Prime Video). Parodi también se desempeñó como jefe de distribución en Torneos, y años después fue responsable de Scripted & Light Entertainment, donde centralizó las apuestas de ficción y realities de la productora, célebre por sus transmisiones de fútbol argentino.

Según trascendió, las propuestas presentadas por Parodi no fueron aprobadas por la administración de la TV Pública, que le pidió suma austeridad. Sin embargo, antes de su salida voluntaria, el director se encargó de cumplir con los principales objetivos que le fueron asignados: desactivar posibles conflictos internos, armar un equipo de trabajo y diseñar una grilla de programación. Según pudo saber LA NACION, tanto la auditoría interna como la reorganización de la programación, que dejó a ciclos y a noticieros fuera del aire, fueron dos de los propósitos de la gestión de Parodi que pudieron desarrollarse satisfactoriamente.

Con la salida de Parodi crece la expectativa en torno a qué pasará con su equipo de trabajo, integrado por Leonardo “Len” Cole, como gerente artístico; Fabián Gijón, como gerente de noticias (que con este panorama toma más protagonismo, ya que los noticieros serán los únicos ciclos en vivo) y Rafael Dibello, como gerente de producción.

Nuevas medidas y autoridades

Como parte de la reestructuración, se espera que la semana que viene, una vez efectuado el retiro de Parodi, Eduardo González se convierta en el máximo responsable interino de la señal de televisión. Actualmente, González ejerce el rol de coordinador general de todos los medios públicos en intervención y pertenece al círculo de confianza del abogado Diego Chaher, interventor de Radio y TV Argentina, el organismo que incluye a la señal estatal, así como a Radio Nacional, Télam y Radiodifusión Argentina al Exterior.

González cuenta con una amplia trayectoria en los medios de comunicación, entre las que se destacan su cargo como director de técnicas y operaciones de Telefe, su gerencia general de Canal 9, y su participación en el equipo de management en Supercanal SA (compañía de TV por cable) cuando su CEO era Luis Galli.

Medidas

Entre las medidas que trascendieron se destaca que a partir del jueves 28 de marzo hasta el martes 2 de abril la señal no contará con programación en vivo. Es decir, que por seis días consecutivos no se emitirán ni siquiera noticieros y lo único que ocupará la pantalla de la emisora estatal serán programas repetidos, documentales y partidos de fútbol repetidos.

Si bien nadie lo puede confirmar, los rumores indican que el miércoles 3 abril, cuando se retomen las actividades, abundarán los retiros voluntarios y se especula con la posibilidad de una gran cantidad de despidos, teniendo en cuenta que la decisión de levantar los ciclos en vivo dejaría sin tareas a muchos empleados delante y detrás de cámara. Los trabajadores temen que al presentarse a sus puestos laborales, en la entrada de la calle Tagle 2847, los espere un equipo de seguridad que les impida el ingreso, teniendo como referencia lo ocurrido la semana pasada en las instalaciones de A24 y America TV.

Durante la tarde del viernes pasado, los trabajadores de la TV Pública tomaron conocimiento de una serie de decisiones que afectará tanto a la grilla como a sus tareas y la continuidad de sus puestos laborales. Por lo pronto, la señal no renovará ninguno de los contratos que vencen el próximo domingo 31 de marzo y que involucran tanto a personal artístico (conductores, columnistas, cronistas) como a técnicos y trabajadores detrás de cámara.

Los noticieros serán los más afectados, pero los únicos segmentos que saldrán en vivo desde abril. Hay incertidumbre respecto a los periodistas de los programas de noticias: se oficializó que, de los cuatro noticieros diarios y tres de fines de semana, solo permanecerán tres en total. Las ediciones que continuarán con su emisión serán el noticiero del mediodía (de lunes a viernes de 12 a 13.30) y el central (que tendrá lugar de 20 a 21.30) y Televisión Pública Noticias Internacional (se emitirá los viernes a las 18, con repeticiones los sábados a las 17.30).

De esta manera, las ediciones informativas de la mañana (que se emitía de 6.30 a 8) y de la medianoche (al aire de 23.45 a 0.10) se eliminarán por completo. En el marco de estas medidas, este fin de semana no habrá ningún noticiero en vivo que el 24 de marzo cubra la marcha y el acto por el del Día de la Memoria.

Según trascendió, hay malestar en el área de noticias y ya se contempla el despido de al menos 10 periodistas. Según trabajadores de la emisora, varios empleados de planta permanente que fueron efectivizados justo antes de la finalización de la gestión anterior no entran en la serie de despidos que se esperan en los próximos días.

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